Daniel Artana
La economía argentina transita desde inicios de 2018 un proceso recesivo con inflación en ascenso: el corte abrupto de financiamiento externo privado que sólo pudo ser compensado parcialmente por los fondos aportados por organismos multilaterales, impulsó una caída en el nivel de actividad que permitió "generar" dólares comerciales por medio de una caída drástica en importaciones.
Antes de las elecciones, la administración Macri no tiene chances de hacer cambios estructurales. La herencia del próximo gobierno.
A raíz del deterioro de la economía argentina durante el 2018 y a pesar de los esfuerzos del gobierno nacional por mejorar los números fiscales y del acuerdo firmado con el FMI, ha vuelto a aparecer en el debate público la posibilidad de un default del soberano.