Ricardo Roa
Si pensaron en el gobierno que el Mundial bajaría tensiones, suma otra inquietud más. Y para llenar el cartón, Larreta metió otra en el PRO, lanzando a Quirós candidato.
En lo que sí somos y seremos campeones es en declaraciones, boludeces y afines.
Argentina lanzó una ridícula guerra por Botnia. Fue una guerra contra nosotros mismos.
Con la inflación sin freno, el Gobierno reza que San Messi le patee el problema para adelante.
La vice no acata el fallo sobre la Magistratura. Es algo grave que nadie asume lo que significa. Te doy dólares y vos manteneme los precios: la fórmula que vuelve para llegar a las elecciones.
Mauricio Macri no dijo qué piensa hacer. Lograron evitar que escale el conflicto. Golpe de la Corte a la vicepresidenta.
A último momento colaron decenas de artículos nuevos en el Presupuesto con hijos y entenados.
En el Frente de Todos anda cada uno por su lado y surgen raras sociedades de incierta duración.
Camioneros apalean y copan una empresa. ¿Y dónde está el Gobierno? Pasa de todo y es como si no pasara nada.
Del teléfono mudo a los habladores y una nebulosa de abogados de relación con la AFI.
¿Quién metió de nuevo la pata con el campo? No problem. Alberto Fernández se dedicó en Nueva York a probar guitarras.
Se renueva un organismo clave que designa, saca o salva jueces.
Mientras Cristina Kirchner y Sergio Massa ganan protagonismo, Alberto Fernández lo pierde al igual que Juan Schiaretti y Facundo Manes.
Abucheo en la cancha de Boca. La Revolución de la Recoleta. Amenazas de Sergio Massa. Y Juntos por el Cambio que no da pie con bola.
Nunca se embanderó con Juan Domingo Perón y ahora hasta cantó la marcha. Busca refugio y buscará aprovecharse del ex presidente de Brasil.
La primera medida concreta de Sergio Massa no fue anunciada por el ministro, sino por su esposa Malena Galmarini.
Cristina Kirchner no quiere quedar pegada al tarifazo. El negocio del litio detrás del cambio de funcionarios.
Cristina Kirchner, como Sergio Massa, esperaba opacar al fiscal, que expuso como nunca la corrupción del kirchnerismo.
Después de una pelea de Alberto Fernández con el jefe del banco, se cayó un crédito ya acordado a la Argentina.
Los memes toman en broma cosas serias. El Gobierno, con discursos, toma en serio cosas que son bromas.
La vicepresidenta habla de lo mal que le va al país para no hablar de lo mal que le va a ella.
Destrabará así cualquier objeción al juicio, uno de los que más preocupa a la vice. Anticipándose, el kirchnerismo cargó contra los jueces.
Destrabará así cualquier objeción al juicio, uno de los que más preocupa a la vice. Anticipándose, el kirchnerismo cargó contra los jueces.
Si hay culpas por la aeronave venezolana-iraní que aterrizó en Ezeiza, también son de los fantasmas. Agustín Rossi dice que la cuestión es muy simple y Sergio Massa, que detrás está Mauricio Macri.
El golpe de la realidad lo tuvo en Ezeiza: no entramos a la OCDE y, de yapa, llegó acá un raro avión venezolano-iraní.
Las acciones valían 40 dólares hace 10 años y hoy, apenas 4 y pico. En valor, YPF está destruida. Kulfas defendió los argumentos de Cristina y Cristina lo hizo echar en cuarenta minutos.
México desmintió que apoyara al presidente argentino para montarle a Biden una contracumbre.
La vocera Gabriela Cerruti habló en España de la guerra en Ucrania sin nombrar a Vladimir Putin. Alberto Fernández, su jefe, había expuesto en ese país otra posición.
Francisco, que no le dio la foto a Cafiero, sí se la dio a solas a los cristinistas Capitanich y De Pedro.
Zafar con plata de la fiesta en la quinta presidencial no hace otra cosa que agravar lo que pasó.
Al jefe de La Cámpora le dio un ataque de importancia o Cristina Kirchner lo mandó a atacar como nunca a Alberto Fernández.
La Corte volteó enseguida la insólita candidatura del juez Bento y reforzó un tribunal clave.
Todo el mundo, menos los que lo tramaron, pensó que la vicepresidenta rompió sola el bloque. Tuvo una ayuda inesperada.
Reinterpreta el fallo de la Magistratura para que sean oficialistas los nuevos consejeros que designe el Congreso.
Alberto Fernández está reaccionando. La disputa en el INCAA, otro capítulo de la interna. En las facultades, ganó el reformismo y perdió La Cámpora. Se confirma el mayor rechazo de sectores medios al kirchnerismo.
Si para el ministro Jorge Ferraresi los indicadores económicos son fabulosos, cómo no va a seguir juzgando el juez Walter Bento.
Otra insólita propuesta de Alberto Fernández. También de Gustavo Beliz, que se creyó para controlar las redes sociales.
Dicen que Bergoglio quiere reservarse para mediar. Pero hay detrás una feroz interna religiosa en la que está interviniendo y tiene una visible cercanía con el zar ruso.
El fútbol no es política, pero a veces es un buen espejo donde los políticos podrían mirarse. A diferencia de Alberto Fernández, a ninguno de esos dos DT se les ocurriría no planificar.
Mientras Fernández firmaba con el Fondo, Cristina metía en la misma bolsa a los bancos y los narcos.
Después de su renuncia, Polak volvió al país e insistió: “No es ético cobrar sin trabajar”. Alfonsín trabaja, pero más de comentarista K que como embajador argentino.
Plan no hay. Sí, viajes y fantasías. Y un nuevo negocio: la hidrovía
Las señales que pasa el jefe de Gobierno porteño: va por ampliar acuerdos, se aleja de María Eugenia Vidal y se independiza de Mauricio Macri.
Cafiero se prueba el traje de canciller y Fernández se plancha el suyo para ver a Putin y Xi Jinping.
Alberto Fernández hace y dice lo que su vicepresidenta quiere. Los dos creen que los demás no funcionan.
Preside la Celac, una mini OEA anti Estados Unidos. El jefe radical hace suyo el relato oficial.
Fin de año con cosas de la peor Argentina. La oposición se las arregla sola para derrotarse.
Para ser más Europa, la izquierda hace una reforma laboral. Aquí es mala palabra.
El ministro de Salud de Axel Kicillof dice que, como tienen plata, hacen más fiestas. En la práctica es al revés, retrucó Fernán Quirós.
Crecen las pruebas contra Walter Bento, que ponía y sacaba presos por plata. El cristinismo lo protege.