Malú Kikuchi
El ser humano tiene la ambición de controlar. Controlar algo, ya que la vida es finita, las enfermedades acechan, el clima es adverso o benéfico, el tiempo se le escapa entre los dedos. En este desierto de certezas, controlar algo o a alguien o a muchos, es deseable.
Cristina va por todo. Rápido. La Justicia se le acerca. Necesita con urgencia cambiar el poder judicial y sobre todo el Ministerio Público. Quiere manejar a los fiscales y al Procurador General de la Nación. Si lo consigue, se acabó la República.
Alguna vez Perón le dijo a sus más fervientes seguidores que “la política era la política exterior, que lo demás era administración”. Hoy, la administración que se dice peronista, es mala en todos los rubros y la política exterior es pésima. Estamos mal, vamos peor.
Según el diccionario, “incertidumbre” es, falta de seguridad, de confianza o de certeza sobre algo, especialmente cuando crea inquietud. Curiosamente es la palabra más usada por el gobierno en tiempos de coronavirus.
La Argentina está sufriendo la segunda ola de coronavirus. Debía estar preparada para esta desgracia, pero lamentablemente no lo está. Malas políticas sanitarias signadas por la ideología, la falta de vacunas y la obscenidad de los privilegios en las mismas.
Y la Corte, falló. Lo firmaron 4 jueces en el mismo sentido y la 5ª jueza se abstuvo. El fallo provocó una revolución intelectual. No es cierto que fue un fallo salomónico, tampoco fue un fallo para quedar bien con una de las partes, fue un fallo constitucional.
Se supone que la palabra “autónoma”, que significa “facultad del poder de una entidad territorial, integrada en otra superior, para gobernarse de acuerdo con sus propias leyes y organismos”, define perfectamente la situación de la Ciudad de Buenos Aires.
Incoherencia según la RAE* es "Cosa que carece de la debida relación lógica”. O sea que no es congruente, no cohesiona.
¡Qué buena pregunta! Sería importante para la Argentina poder contestarla en profundidad. Por el momento, esa profundidad no es posible, sólo se tienen escasos datos biográficos de Martín Ignacio Soria, nacido en General Roca, provincia de Río Negro.
Perdón, voy a ser referencial. Con el aniversario de los 100 años del nacimiento de Astor Piazzolla quiero contar algo que viví y que merece ser contado. Yo trabajaba entonces en la producción de los programas de Bernardo Neustadt, con otras personas.
La Argentina, sería mentiroso escribir “La República”, está sucediendo un fenómeno desconocido por estas últimas generaciones. Habría que remontarse a la Revolución de Mayo y a las guerras independistas para ver algo parecido.
Horacio César Pietragalla-Conti es la historia de sus padres. Nació el 11/3/1976 en la provincia de Buenos Aires. En 2003 descubrió que era hijo de desaparecidos y se convirtió en el nieto recuperado Nº 75. Es miembro de Abuelas de Plaza de Mayo y forma parte de La Cámpora. Responde a Cristina Fernández de Kirchner.
Utopía, de acuerdo a la definición de Quevedo en traducción casi literal del griego, significa "no hay tal lugar". La palabra se hizo famosa a partir de un libro de Tomás Moro (santo para católicos y anglicanos) escrito en 1516, donde describió una isla habitada por una sociedad ideal.
Sabina Frederic es Licenciada en Ciencias Antropológicas, UBA y Doctorada en Antropología Social en la Universidad de Utrech, Alemania. Profesora en la Universidad de Quilmes, independiente en el CONICET. Trabajó en Defensa (2009/2011) y en Seguridad (2012/2014).
La Vicepresidente y real presidente del país, continúa con su original sistema de comunicación, el epistolar. No habla públicamente, no lo hace en persona con Alberto F., lo hace a través de cartas. Pero sin destinatario, ¿o las dirige al pueblo de la Nación? NS/NC.
Nicolás Trotta es argentino, nació en Buenos Aires hace 44 años, se recibió de abogado en la Universidad de Belgrano, es rector de la Universidad Metropolitana para le Educación y el Trabajo y desde el 10/12/2019, es el ministro de educación de la Argentina. Usted que está leyendo, no sea cobarde, no huya, aunque se hable de educación no se va a aburrir. Prometo.
Diego Maradona murió. Lo sabe el planeta entero. Hubo un tiempo en que cuando alguien en algún lugar preguntaba por la nacionalidad del turista y este respondía, “soy argentino”, se escuchaba desde Hong Kong a Nueva York, desde Cape Town hasta Tokio, ¡MARADONA!
La Argentina, país de la excepcionalidad, decidió que la educación en todo el amplio sentido de la palabra no era esencial y debían cerrarse escuelas, colegios y universidades. Nada presencial, todo virtual. Sin haber asegurado antes que todos los estudiantes tuvieran acceso a internet.
¿Alguna vez un político argentino probó decir la verdad? Sí. Lo terrible en estos escasísimos casos, es que la verdad no es linda. No solo no es linda, es chocante, macabra. El 10/4/2020, ya en cuarentena, Jorge Fontevecchia entrevistó al Presidente Alberto Fernández para Perfil.
La 1ª Corte Suprema de la Nación se debe a la ley Nº 27 del 18/10/1862, presidencia de Bartolomé Mitre. Sus miembros juraron el 15/1/1863. Como presidente, Francisco de las Carreras; miembros, Bonifacio del Carril, José Barros Pazos, Francisco Delgado y el procurador Francisco Pico*.
A una Argentina fuertemente convulsionada por una “cuareterna” que suma muertos y una crisis económica feroz, se le vienen sumando las ilegales usurpaciones de tierras, mal llamada “tomas”, cuestión de dulcificar, a través del uso incorrecto del lenguaje, la realidad.
Un país, para ser considerado como tal en la comunidad de naciones, necesita imprescindiblemente contar con un territorio y con una moneda. La Argentina 2020 no controla su territorio y carece de moneda. En estas condiciones, ¿puede el gobierno sostener que la Argentina es un país?
El gobierno del FdT dirigido por Alberto y/o Cristina Fernández, pareciera no tener rumbo. En la OEA votó a favor de Nicolás Maduro, en la ONU en contra; en el Grupo de Lima que exige elecciones limpias en Venezuela, Grupo al que pertenece el gobierno de los Fernández, se abstuvo. Y Alberto F. preside el Grupo de Puebla. Norte, Sur, Este y Oeste.
El gobierno incita al delito, es una aberración en todos los sentidos, pero por desgracia, es una realidad. Incita al delito destruyendo la economía lo que deja a cientos de miles de personas sin trabajo. Incita al delito cuando no es capaz de desalojar tierras tomadas ilegalmente en Guernica y en el Sur.
La Argentina, con relato y sin rumbo, se desbarranca entre incoherencias y confusiones. Corrección, hay un solo rumbo claro, visible y de necesidad inmediata: evitar todos los procesamientos y posibles juicios penales de CFK, por hechos de corrupción durante sus presidencias anteriores.
¡Qué semana! Ha sido una semana emblemática hasta para la Argentina. El gobierno ha hecho explícitas sus mentiras y sarasas. Han sido muchas, algunas de ellas tan, pero tan evidentes, que, hasta los militantes más convencidos del Frente de Todos, han comenzado a vislumbrar la verdad.
El ex presidente Eduardo Duhalde, volvió a hablar. Fue por Radio Rivadavia y con Nelson Castro. Otra vez sus palabras sacudieron a la sociedad. Dijo que la Argentina era un país en permanente retroceso. No es una novedad, pero lo dijo un peronista de un gobierno que dice ser peronista.
El 24/8, en América TV, en el programa “Animales sueltos”, el ex presidente Eduardo Duhalde dijo que “si no cambian estas políticas que no sirven para nada y buscan políticas de consenso como servicio público”. “La Argentina se dirige hacia un escenario peor que el del 2001”. “La gente se va a rebelar” Y amenazó con la posibilidad de “un golpe militar”.
El Código Penal Nacional en su artículo 181 dice que:
El 18/5/2019, en una entrevista en radio Nacional, una semana antes de que CFK se auto postulara a vicepresidente en una fórmula encabezada por Alberto Fernández, el hoy Presidente decía que la senadora debía competir contra Macri, “es candidata o se va a su casa, no puede haber votos prestados. No tengo ganas de que haya un títere en la Casa Rosada, y que el poder esté en Juncal y Uruguay”.
La diferencia entre “oír” y “escuchar” es significativa. Según el diccionario de la RAE*, “oír” es percibir con el oído y “escuchar” es prestar atención a lo que se oye. El 17 de agosto durante el impresionante banderazo en todo el país, el gobierno de los Fernández oyó, pero no escuchó.
El planeta ha sido atacado por un minúsculo virus que solo se puede ver a través de un microscopio electrónico y que, sin embargo, ha trastornado a más de 7.500 millones de habitantes. El covid-19 no tiene fronteras, no distingue razas, nacionalidades, edades ni sexos, ataca por igual a todos.
Las desesperanzas son muchas. Demasiadas. La Argentina de hoy, entre la pandemia, la cuarentena eterna (142 días), la economía destruida, la educación cuesta abajo, la inseguridad creciente, el desempleo que aumenta, más el intento de desmantelar el poder judicial, desesperanza.
La vicepresidente de la Nación se ha mandado hacer una reforma judicial a su medida. Sobre una intención fallida de Néstor K, que quería llevar los juzgados penales federales de CABA a 46, cuestión de diluir el poder de Comodoro Py, la desempolvó y le sumó a su abogado Alberto Beraldi.
La frase del título la dijo un ciudadano argentino residente en el Barrio Los Naranjos, situado en Machwitz, provincia de Buenos Aires. Parece ser así. La inseguridad viene asolando al país desde hace tiempo. Se cimenta en el aumento de la pobreza, la falta de trabajo y el seudo “garantismo”.
Era inevitable que sucediera. Sucedió. Empezó la guerra abierta entre el Alberto F y su Vice. Desde que CFK eligió su candidato presidencial, hecho inédito en la historia y se propuso ella como candidata a Vice, teniendo ambos explicitas diferencias, la semilla de la discordia estaba presente.
La confusión es total. Es malo estar confundido y es peor si la confusión la genera el Presidente de la Nación. ¿Quién es Alberto Fernández? Más allá de ser abogado, político y ahora presidente, ¿quién es? ¿Es el que llama a la unidad, el que vino a terminar con la grieta? ¿Es que tiene como Roberto Carlos un millón de amigos, o el que se enoja y reacciona con violencia?
Argentina, país contradictorio, está en plena y dura y eterna cuarentena; la gente no trabaja, no produce, no vende, no compra. Está paralizada, el resultado es que hay hambre. Los comedores populares se multiplican y no alcanzan, la tarjeta alimentaria no alcanza, la ayuda del estado no alcanza. Ante este desolador panorama, se ataca la producción del campo.
Las cuarentenas existen desde hace miles de años. Viene del latín, “quadraginta”, 4 veces 10. Se usó puntualmente en Venecia con la peste negra (bubónica) en 1348. Duró 40 días, no más. Hoy se sabe que la mayoría de las enfermedades se incuba en un tiempo menor.
En el 2011 la empresa de aviación chilena LAN se fusionó con la brasileña TAM. Así nació LATAM, la mayor aerolínea de la región. En el 2018 movilizó a 74 millones de pasajeros. LATAM Airlines Group tiene filiales en Chile, Perú, Ecuador, Colombia y los Estados Unidos. Tenía en la Argentina.
Las palabras tienen peso propio, un significado real y un significado imaginario. Las palabras son armas que se usan a favor y en contra del gobierno y del pueblo. La palabra “soberanía” es mágica para los argentinos. La palabra “expropiación” remite al fantasma de Hugo Chávez.
¿Cómo se llamará una cuarentena (se supone de 40 días) que se extiende por ahora, a 101 días exactos? En un poema de Robert Browning* a la que luego sería su mujer, Elizabeth Barrett* le decía: “Envejece junto conmigo, lo mejor está por venir”. Acá, nadie puede prometernos eso.
A partir de hoy 30/5/2020, para salir de la casa todos los argentinos o extranjeros que residan en el país deberán bajar de su teléfono celular una APP (aplicación) inventada acá, denominada “CuidAR”. Desde ese momento estarán “cuidados” del covid-19 y controlados por el gobierno.
George Orwell con certera premonición decía que “El que controla el presente controla el pasado, el que controla el pasado controlará el futuro” (“1984” escrito en 1949). La Argentina es hoy un país total y completamente controlado por el Presidente y poca gente más.
La impunidad es la cualidad de quedar sin castigo una culpa o un delito. O varios. Deriva del latín, "impúnitas" y define el desenfreno. Es en esa dirección, hacia la impunidad total de la familia Kirchner, donde nos dirigimos. Los resortes del gobierno trabajan para conseguirlo.
La memoria es la capacidad de recordar. Para los que nacieron después de 1973 o eran muy chicos para tenerlo presente, vamos a recuperar un hecho de nuestra historia que se olvida deliberadamente o se exalta equivocadamente.
Estoy preocupada, más que preocupada, asustada. Asustada por vivir en un país que no está a la deriva, estoy, estamos en un país cuyos gobernantes saben muy bien hacia donde quieren llevarnos y ese objetivo no es el que votó el casi 45% de los ciudadanos.
El senador por Jujuy, Guillermo Snopek, Frente de Todos, presentó un proyecto de ley que pretende la intervención federal del poder judicial de su provincia. Snopek es un senador conocido, pero no tan importante como para que su proyecto adquiera la velocidad que adquirió.
Después de su discurso del 1º/3 ante el congreso nacional, dando inicio a las sesiones ordinarias de este año, no se sabe si Alberto F está lleno de buenas intenciones o si miente a conciencia. Fue un discurso lindo, con palabras lindas e intenciones lindas (no todas). Muchos QUE, ningún COMO.
El brete es un pasadizo incómodo, estrecho y corto, entre dos estacas, que es usado para hacer pasar al ganado que se quiere cambiar de lugar. Simbólicamente se refiere a estar en un apriete del que resulta difícil salir. Ese es el lugar en que se encuentra el gobierno de Alberto F y… Argentina.