En el oficialismo, implica profundizar la idea de polarización y por eso el Jefe de Gabinete (Peña) dijo “Massa y los K son lo mismo”. Esa misma idea ya expresó respecto a las candidaturas del PJ bonaerense, cuando señaló que Cristina y Randazzo eran “lo mismo”.
Pero mantener la cohesión interna dentro de Cambiemos, ha sido un tema relevante en los últimos días. El conflicto con Carrió escaló, al confirmar el Juez Rafecas que las denuncias contra ella eran “causas armadas”. Carrió reiteró que el servicio de inteligencia (AFI), había participado en este “armado” y exigió el desplazamiento de la número dos del organismo (Majadalani), a quien acusa de perseguirla y vigilarla.
La AFI inició una investigación sobre esta situación y Peña dijo que se va a “evaluar” el problema. La líder de la Coalición Cívica también ha dicho que la dirigencia política -incluido el oficialismo- y la justicia “protegen” al ex Ministro kirchnerista Julio De Vido, quien sería el primer comprometido en las denuncias de sobornos sobre Odebrecht en Argentina. El cierre de listas también genera tensiones dentro de Cambiemos en varios distritos y tienen como principales protagonistas al PRO por un lado y a la UCR por otro.
El domingo 4 de junio, comienza el proceso electoral: en La Rioja se realizan elecciones provinciales para elegir 16 legisladores; en Corrientes, se elige intendente y en Chaco, las PASO para la elección en la cual se renovarán 18 legisladores.
En la oposición, Cristina confirmó públicamente que será candidata y al mismo tiempo exige al PJ bonaerense que eluda la interna para consagrar su candidatura sin la competencia de Randazzo. El martes 23 de mayo, convocó a los intendentes de esta fuerza política en la provincia de Buenos Aires y asistieron 20, un tercio del total. Dos días después, en un reportaje realizado con cuatro periodistas kirchneristas en el Canal C5N, dijo que si su candidatura era conveniente para sumar votos y ganar, la asumía.
Al mismo tiempo, avanzó en múltiples críticas a Macri, entre las que incluyó su posición de que debía suspender las obras de Odebrecht que están en curso en Argentina. A esta definición, agregó que quería la unidad del Peronismo bonaerense, lo que incluía que no hubiera competencia en las Paso. La respuesta de Randazzo fue inmediata y en una reunión con dirigentes sindicales metalúrgicos, sostuvo que se presentaría igual compitiendo con ella.
Varios intendentes justicialistas bonaerenses, apoyaron a Randazzo, al igual que dirigentes como Julián Domínguez y Juan Manuel Abal Medina. Ningún gobernador peronista respaldó la decisión de Cristina de presentarse. Pero el ex Ministro de Interior y Transporte del Kirchnerismo también dijo que si perdía en las PASO, se alinearía con Cristina. La cuestión que queda planteada es si ella aceptará competir y lo probable es que si lo haga.
Massa y Stolbizer por su parte realizaron su lanzamiento el 25 de mayo, confirmando que competirán en la provincia de Buenos Aires como tercera opción. El primero, en forma directa dijo “no puede ser que nos obliguen a elegir entre un gobierno para los ricos y un gobierno de ladrones”.
Los dos cuestionaron la “grieta” -el conflicto entre Cambiemos y el Peronismo- diciendo que era un obstáculo para el crecimiento. Massa también sostuvo que él frenó a Cristina en 2013 y volverá a hacerlo ahora. Voceros de Massa (Solá y Pignanelli), refutaron las críticas de Peña contra el ex Intendente de Tigre, quien tratará de moverse rápido para instalar la competencia entre los candidatos, tratando de aprovechar que los del PRO para senadores (Esteban Bullrich y Gladys González), tienen menor nivel de conocimiento que él y Stolbizer. Massa sale así a polarizar con Cristina, antes que lo hagan los candidatos del PRO.
Pero el oficialismo apuesta a que Macri y Vidal jueguen un rol decisivo en la campaña, reforzando a sus candidatos. En última instancia, el planteo de Cambiemos será que Cristina, Randazzo y Massa, son expresiones del Peronismo, a quien identificarán con el fracaso argentino. Pero todo ello tiene matices. Es así como la semana pasada, al inaugurar una obra en el conurbano junto con Vidal. Larreta y el intendente justicialista de Lomas de Zamora (Insaurralde), Macri volvió a citar elogiosamente a Perón y comienza la semana inaugurando una clínica de un sindicato peronista (SMATA).
Mientras se aceleran las definiciones político-electorales, el gobierno enfrenta frenos crecientes en el Congreso, la justicia y el sindicalismo y tiene diferencias con la Iglesia.
En 2016, en los nueve meses de sesiones ordinarias se sancionaron 84 leyes. En los tres meses que van de 2017, sólo dos (la llamada ley correctiva del fallo de la Corte por el “dos por uno” y el subsidio a los “electro dependientes”).
El acuerdo para el Directorio del Banco Central, va a cumplir un año y medio de demora en el Senado (Sólo lo tiene el Presidente). Las intenciones de remover jueces del fuero federal, también se dilatan. El desplazamiento del camarista Freiler (un kirchneristas acusado de corrupción), se puede postergar nuevamente. La ofensiva contra el sindicalismo al que Macri acusó de “mafia” se diluye.
Ya se han abierto nuevos canales de negociación con la CGT y ha sido convocado el Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil para junio. En el Tedeum por el 25 de mayo en la Catedral ante Macri, el Arzobispo de Buenos Aires (Monseñor Poli), criticó la situación de pobreza que existe en el país y pidió un “diálogo constructivo” entre oficialismo y oposición.
En el Tedeum en la Plata, ante la Gobernadora Vidal, el Arzobispo local (Aguer), criticó la ley provincial promulgada por ella, que obliga en todos los actos y documentos oficiales a usar el término “dictadura cívico-militar” al referirse al último gobierno y afirmar siempre que los desaparecidos fueron “30.000”, aunque la realidad es que fueron la cuarta parte de esa cifra.
Por su parte la Vicepresidenta (Michetti), criticó que el Papa haya enviado una carta a Milagro Sala, deseando una pronta resolución de sus problemas. Hay cierta toma de distancia respecto a las Fuerzas Armadas, ya que este año el Presidente no asistió al Festival de Bandas Militares que se hizo en conmemoración de la fecha Patria, ni asiste a la conmemoración del día del Ejército, como lo hizo en ambos casos el año pasado.
En conclusión: a menos de un mes del plazo de las alianzas y la presentación de candidaturas, Cambiemos profundiza su estrategia de “polarización” frente al Peronismo y busca “contener” a Carrió; Cristina ha confirmado que será candidata y exige serlo con lista única, algo que Randazzo no acepta, siendo probable que finalmente compitan entre ellos en las Paso; Massa y Stolbizer hicieron su lanzamiento, cuestionando tanto a Macri como a Cristina, criticando el concepto de “la grieta” y buscando polarizar con la ex Presidenta y el gobierno enfrenta frenos en el Congreso, la justicia y los sindicatos, tiene diferencias con la Iglesia y toma cierta distancia de las Fuerzas Armadas.
Rosendo Fraga