Miércoles, 18 Enero 2023 06:17

¿Para quién era la foto? - Por Sergio Crivelli

Escrito por

La imagen en todos los medios de sindicalistas recorriendo las góndolas con cara de matones fue un mensaje simple y directo, pero dejó una incógnita: ¿a quién iba dirigido? 

En primer lugar, no a los empresarios. La inflación aquí no es un problema de comercialización ni de producción, sino monetario de origen fiscal. Por eso todos los controles de precios de los últimos 70 años han fracasado. Por eso un gobierno peronista como el de los Fernández tuvo en tres años más inflación que el del libremercadista, Mauricio Macri. Por eso los intentos de intimidación no resolvieron el problema, ni lo resolverán. Si no, que lo diga el pintoresco Guillermo Moreno. O la muy trabajadora Paula Español o tantos otros secretarios de Comercio que a lo largo de los años se han tenido que ir derrotados por la carestía imparable. 

Por otra parte, los precios supuestamente fiscalizados por barrabravas fueron pactados por Sergio Massa con los empresarios. Es sabido que el ministro tiene muy buen diálogo con el "establishment" nativo que recibió con alivio su llegada al Palacio de Hacienda. Todos pensaban que Martín Guzmán hacía lo que podía, pero que en el cargo hacía falta un lobbista, alguien con la agenda de Massa.

En segundo término, ¿la foto era para los sindicalistas con los que Massa quiere cerrar este año paritarias del 60%? Parece que tampoco. Los Moyano salieron a deslindar responsabilidades apenas estalló el escándalo. Dejaron solo al ministro con las pésimas repercusiones mediáticas y el costo de vida para arriba. Nadie lo defendió.

Tercero, ¿habrá sido un mensaje para los votantes ante quienes pretende presentarse como candidato en pocos meses? Poco probable; todas las encuestas demuestran que se ha reducido el número de quienes culpan de la inflación a los comerciantes y crecido el de los que culpan al gobierno. Por otra parte, la credibilidad del actual gobierno se ha derrumbado en proporción directa al deterioro de la palabra presidencial que contamina a todo el gabinete.

Por último, ¿su destinataria habrá sido la vicepresidenta? Es sabido que Cristina Kirchner oficiará de gran electora de la próxima fórmula peronista. Ya avisó que no se presentará a lo que considera sin decirlo una derrota segura (ella prefiere llamarla proscripción) y que la reelección de Alberto Fernández existe sólo en el universo paralelo del periodismo amigo (por llamarlo de alguna manera). Candidato atractivo de La Cámpora tampoco hay, por lo que Massa parece ser el único a mano con algún grado de competitividad.

El domingo último en el sitio web de un vocero de la vice se publicó una extensa exposición de Massa sobre su "estrategia" económica. El objetivo de la entrevista era el bendecirlo ante la feligresía K.

Massa tiene varios sombreros. Se pone uno cuando habla con el "establishment" o viaja los Estados Unidos, donde es muy apreciado, y otro para hablar al electorado K. La idea, entonces, habría sido hacer kirchnerismo explícito (como lo hace con la Corte) para fortalecer su chance de encabezar la boleta peronista. Hasta que no se pronuncie la vice, la incógnita persistirá.

Sergio Crivelli   
Twitter: @CrivelliSergio

Top
We use cookies to improve our website. By continuing to use this website, you are giving consent to cookies being used. More details…