Por el impuesto a las tarjetas, la Ciudad había recaudado cerca de 30 mil millones de pesos en 2022 y estimaba 45 mil millones para este año. "Es un monto muy similar al que el gobierno no nos transfirió desde que salió el fallo de la Corte en diciembre", señalaron desde el gobierno porteño.
Según adelantaron a LPO, los costos por dar de baja el impuesto a las tarjetas son financieros, pero no económicos. "Es plata que tenemos que adelantar, pero después vamos a recibir", dijeron.
En parte, ese faltante fue financiado "con baja del gasto corriente" cercana al 10%, una medida que comenzó durante la pandemia. "Hicimos que el gasto público fuera más eficiente y pudimos equilibrar", explicaron.
La semana pasada, el Gobierno nacional oficializó el pago a través de la emisión de bonos del Tesoro Nacional, una modalidad que la Ciudad no acepta. "El fallo de la Corte resulta claro al señalar que este pago se debe realizar en el marco de la Ley de Coparticipación Federal de Impuestos, es decir a través del pago diario del coeficiente y mediante transferencia del Banco Nación, como sucede con el resto de las provincias", rechazaron desde el gobierno porteño.
"No voy a quedarme quieto viendo cómo un Gobierno que quiebra las instituciones toma de rehén a los argentinos", objetó Larreta.